Buscando, en esta tapera, un Gran Danés de doce años, que perdí por algún rincón, encontré por esas cosas del destino unas fotos viejas de viajes y paseos realizados, amigos compartidos y lugares descubiertos.
Al instante recordé la frase que me dedicara en una canción, un amigo cercano llamado Lito que decía así:
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"Dicen que viajando se fortalece el corazón, pues andar por nuevos caminos te hace olvidar el anterior"
Frase a la que me aferré en momentos duros donde dejar el hogar elegido se hacía difícil pero inevitable y sabiendo siempre que lo mas importante es que no me encuentren Hijos de la Recalcada Puta Madre!
Tiempo mas tarde de escuchar un Long Play del amigo Lito, reconfortado, por que una frase que me pintaba de cuerpo entero era comercializada en la disquerías de la calle Corrientes (Ciudad de Buenos Aires) y era internalizada por miles de jóvenes que cantaban y silbaban esa tonada contagiosa, me enteré que en realidad no había sido escrita para mí sino que era una canción autoreferencial. Un autoretrato de la enfermedad que le habían descubierto, dos cientificos chinos al maestro Lito: "ElMal de Lito Alzheimer".
Parece ser que el famoso cantante caminaba por las calles olvidando cada cien metros donde carajo había estado hacía cinco minutos atrás.
No es importante la anécdota, como de costumbre, ni se que poronga le habrá pasado a Lito, lo que importa es que aparecieron estas fotos de mierda que me puse a buscar el día que terminó "Si lo sabe Cante" y que por esas cosas de la vida aparecen ahora mientras busco a Pipo, mi Gran Danés de doce anos.
No es importante la anécdota, como de costumbre, ni se que poronga le habrá pasado a Lito, lo que importa es que aparecieron estas fotos de mierda que me puse a buscar el día que terminó "Si lo sabe Cante" y que por esas cosas de la vida aparecen ahora mientras busco a Pipo, mi Gran Danés de doce anos.
En fin... les dejo estas postales y prometo mostrarles otras si es que encuentro alguna más en medio de este kilombo.
Post Data: Si encuentran a Pipo en la calle no lo acaricien por que tiene mal genio y debe tener hambre, mejor peguenle un tiro en la cabeza o ahorquenlo con un cinturón.
Pipo.
Gracias.
Mariscal Tito.
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Postales de Viaje.
Un día cualquiera, en una Plaza Peronista.
Junto a tres grandes amigos a los que prometí no develar sus nombres, yo soy el de la derecha.
Posando en el laboratorio de Ronald Ritcher (Bariloche)
En Chernobyl, andando a cagallo.
Adolescencia en Sunchales.
Esta no me acuerdo bien donde me la saqué pero la pongo igual.
1 comentario:
que estilizado que está el Mariscal en la foto del auto!! Parece que despues en la luna se comió un par de asados y engordó 20 kilos!!!!
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